sábado, 4 de julio de 2009

Árboles frutales.

Algunas veces no se necesita tanto.

Una sencilla combinación: Un poco de whisky + Bailar.

Bailar así, entusiasmándose,
los ojos siendo dos líneas finas debido a la sonrisa pronunciada, levantando los brazos intentando sostener la luna, cantando desafinadamente, dejándose caer, aspirando el instante sin prestar atención al entorno porque algunos no logran comprender y comienzan a escandalizarse y/o burlarse.

Del whisky, ni qué decir.

Y que pase lo que tenga que pasar.

4 comentarios:

M dijo...

eso nunca me ha ocurrido: nunca dejo que pase lo que tenga que...

Gato Pardowski dijo...

...Que se acerquen los niños, los amantes del ritmo; que se queden sentados los intelectuales...
Silvio Rodriguez "Debo partirme en dos"
www.elfunestotejado.blogspot.com (si tienes cuenta en hotmail: www.elgatopardomelancolico.spaces.live.com)
No soy bueno, pero intento al menos escribir.

Gato Pardowski dijo...

Aunque eso del whisky, no, como que no va (conmigo). Viva Cuba!.
Gracias por voltear al tejado.

s0m4 dijo...

Íjole, el whisky... complicada situación, con ese sabor a madera, ni quien se resista. Creo que te comprendo.